30 abr 2011

El poder de los niños en las compras

Muchas compañías se están dando cuenta y están enfocando sus estrategias de mercado hacia los nuevos compradores: los niños. Como todos sabemos los niños de hoy tienen más voz y voto en sus hogares que en los tiempos pasados. Sin embargo el hecho de que estén marcando las decisiones empresariales es algo que no todos saben. Según estudios de la agencia de publicidad Rep/Grey lo que quieren los niños está pesando en el interior de las empresas y su voz se está escuchando con el interior de las empresas. Muchas compañías están creando estrategias para despertar el interés de los niños y recordar la infancia a los adultos.

Quizás el ejemplo más antiguo en donde se ha entendido el poder de los niños es el de esparcimiento familiar. En este ámbito McDonald´s y su famosa “Cajita Feliz” entendieron muy bien de que se trata. Desde los menús hasta las sorpresas en cada cajita logran capturar la atención de los niños y de su familia. Ésto ha posicionado muy bien a la marca y la ha catapultado.

Es evidente que a los niños no les importan las marcas pero lo que sí les captura son las experiencias nuevas y las sorpresas. Dejar sin palabras a un niño es el secreto, el “me gusta mucho” no alcanza, sorprenderlos es el punto.

No se trata de que sean más exigentes hoy que ayer. Los niños son naturalmente curiosos y es por este medio en que puede lograrse la entrada de productos y servicios en sus hogares. En este sentido sus padres son contagiados por ello y las posibilidades se amplían.

Hay que tener en cuenta también que a los niños de hoy se los satura en la oferta de productos destinados a ellos, por eso están más selectivos, en esto arrastran a sus padres que consciente o inconscientemente confían en ellos para las elecciones. Cualquier esfuerzo que no los tenga en cuenta y que no les hable directamente a ellos será en vano.

Fuente: http://www.formacionempresarial.com/Marketing/cuando-los-ninos-mandan.html

29 abr 2011

Buen trimestre para las grandes empresas

A pesar de que el sismo de Japón del 11 de marzo afectó la distribución de autopartes para las grandes marcas, la fuerte demanda de consumidores de los EEUU, China y otros mercados emergentes, logró cerrar un trimestre único para el sector.

El mayor fabricante automovilístico europeo, el alemán Volkswagen, batió otro récord. Tras haber ganado y vendido una cantidad de autos nunca registrada en 2010, entre enero y marzo logró utilidades por 2.500 millones de dólares contra los 473 millones del mismo periodo de 2010. Su gran objetivo para este año es destronar a Toyota, la líder mundial de los últimos años que tras el sismo perdió un 30% de producción.


Volvo también informó un alza del 22% de sus utilidades, en gran parte por la renovada demanda de camiones de los EEUU. Ford, gracias al boom de ventas de autos más compactos como el Fiesta, dijo que ganó US$2.600 millones en el primer trimestre, algo inédito.

El fenómeno se replica en todo el mundo. El gigante sueco de telecomunicaciones Ericsson, arrojó en el primer trimestre del año una ganancia de 675 millones de dólares, una cifra cuatro veces superior a la registrada en el mismo período del año pasado.

"Las ventas en el primer trimestre no se vieron afectadas por el devastador terremoto y posterior tsunami en Japón", afirmó el CEO de la firma, Hans Vestberg. Sin embargo, "la cadena global de suministro de componentes es en parte dependiente de Japón y estimamos que habrá retrasos en la entrega de determinados productos", apuntó.

En China aumentó la demanda de 2G y en la India de 3G. A su vez se elevó el volumen de datos en Estados Unidos, informó Ericsson, que gestionó en el primer trimestre redes para unos 800 millones de suscriptores.

Los indicadores fundamentales de la economía siguen bien. El PIB mundial crecerá entre 4% y 4,5%" predijo el economista argentino Luis Palma Cané. El analista, a su vez, destacó que salvo excepciones como Venezuela, todos los países van a crecer este año, inclusive Japón. Y esto se traduce en más consumo y mejores ingresos para las empresas.

Otro capítulo aparte son las materias primas. A valores inéditos en el cobre, la plata, el oro, la soja, entre otros, el sector está de fiesta. Barrick Gold Corp., el mayor productor mundial de oro, ganó un 22% más en el primer trimestre tras embolsar U$S 1.000 millones.

Las empresas latinas tampoco se quedan afuera de la bonanza. El Banco Bradesco de Brasil, el segundo mayor del sector privado del país, reportó el miércoles un alza de sus ganancias de un 28 por ciento, gracias a una fuerte demanda por créditos para el consumo.

En el caso puntual de los EEUU, la ganancia por acción del índice S&P 500 tocó el récord de 100 dólares. Muchas de las grandes corporaciones estadounidenses exportadoras se están beneficiando de la depreciación del dólar contra otras monedas.

Por ejemplo, el año pasado, por cada euro de mercadería vendida, una empresa norteamericana recibía 1,2 dólar. Hoy obtiene 1,45, un 20% más.

Palma Cané justifica el buen trimestre en que a pesar de la crisis de deuda en Europa, no se cree que el bloque permita un default y en que el terremoto de Japón sucedió a mediados de marzo, por lo que no afectó tanto los resultados corporativos. El impacto, que no sería en definitiva tan fuerte, se sentirá más en el segundo trimestre.

El conflicto en Medio Oriente arroja beneficios e incertidumbre a futuro si no se controla. Con el barril a 124 dólares, las petroleras presentarán balances muy parecidos a los de 2008 cuando el crudo llegó a los 147 dólares.

Sin embargo, si Occidente no logra frenar el conflicto y bajar el precio de referencia, la inflación -ya acelerada en todo el planeta- será peor, afectará el poder adquisitivo, bajará el consumo y sobrevendrá la tan temida recesión.

Fuente: http://america.infobae.com/notas/23869-Trimestre-inolvidable-para-las-empresas-del-mundo

27 abr 2011

Uruguay lucha contra el aumento de inflación

El presidente del Banco Central del Uruguay(BCU), Mario Bergara, manejó la posibilidad de elevar los encajes bancarios como medida adicional para contener la inflación, en especial, para el incremento marginal de los depósitos.

En un evento empresarial celebrado este miércoles, el titular del órgano rector de la política monetaria afirmó que la institución “no descarta utilizar elementos de encaje (bancario)”.

El coeficiente de encajes bancarios indica el porcentaje de los depósitos en poder de los bancos que deben mantenerse líquidos, es decir, que no se pueden prestar ni invertir.


A su vez, el jerarca se refirió al hecho de que “en 2008 se subieron los encajes, (y) después tuvimos un proceso de drástica reducción, al punto tal de que hoy los encajes bancarios (de Uruguay) son de los más bajos de América Latina y notoriamente están por debajo del encaje técnico”.

“En los últimos años, varios países emergentes han comenzado a reutilizar los encajes bancarios como elementos no convencionales de política monetaria y no como objetivos de liquidez bancaria”, agregó.

Una suba de los encajes permitiría reducir el circulante de dinero en la economía y así quitar presión a la inflación, en momentos en que el alza de los precios se ubica en 8,17% en los 12 meses cerrados en marzo.

La medida manejada por el BCU no se refiere a los encajes medios que se aplican sobre los depósito de los bancos, sino a la utilizada “muchos países de la región, y nosotros no descartamos su uso, (que) están comenzando a implantar encajes marginales, es decir, encajes significativos para el incremento de los depósitos”, dijo Bergara.

Por otra parte, el titular del BCU defendió las metas de inflación como instrumento para mantener la estabilidad de precios y restó trascendencia al hecho de que el alza de precios se ubique por fuera del rango.

“Uruguay a adoptado un enfoque tradicional en los últimos años de dar un objetivo de inflación, que dado que sea una medida creíble, los agentes van a creer que las autoridades van a tomar las medidas que tengan que tomar para que la inflación converja a ese objetivo”, indicó.

“El objetivo de inflación no es una cuestión de pegarle al patito. Sino que es una cuestión de dar una señal de orientación que debe ser creíble”, sostuvo Bergara.
“Si hubiéramos mantenido la meta más alta que teníamos antes (de 3%-7%), hoy seguramente la inflación sería más alta y las expectativas de inflación serían más altas”, agregó el jerarca.


Fuente: http://economico.observa.com.uy/nota.aspx?id=9990&sec=1&cont=2&ex=25&ar=1&fi=23